Cuando escribo esto (enero de 2022) la tensión entre Rusia y los países de la OTAN está en máximos y ronda la amenaza de un conflicto armado. La causa/excusa es Ucrania, su acercamiento a Occidente (UE y OTAN incluidas) y el rechazo de Rusia a perder su influencia en un territorio que considera como histórico y a permitir bases de la OTAN tan cerca de sus fronteras.
El asunto es muy complejo, pero en este post daré algunas pinceladas sobre cómo podría afectar a Europa en un aspecto vital: el abastecimiento de gas natural.